Si vamos a cenar fuera de casa, ya sea en otro domicilio o en un restaurante, debemos ser tan moderados como lo seríamos en nuestro hogar en cuanto a la forma de llevar a cabo la ingestión de los alimentos. El que los demás coman muy deprisa o demasiado lentamente no debe ser motivo para que (...)
Si decidimos cenar en el hogar, es aconsejable preparar una buena decoración complementaria para que el ambiente resulte lo más agradable posible y deleitarnos con la confección del menú que, lejos de significar un inconveniente, debería ser sinónimo de distracción y bienestar. Una cena es un momento (...)
El momento de la cena ideal siempre será unas tres tres horas antes de ir a dormir. Debemos seguir las mismas normas de tranquilidad, orden y sosiego que el desayuno y la comida. Es muy importante que la cena se efectúe sabiendo que es la última del día y que tenemos mucha menos prisa de la que (...)
Comer en casa implica orden, ya que ese orden nos ayudará en otras facetas de la vida que abordemos oportunamente. Por ello es mejor comer con el tiempo suficiente como para recoger los cubiertos y vajilla y lavarlos si es posible, que irnos a trabajar pensando en lo mucho que nos quedará por (...)
Si finalmente decidimos comer en nuestra casa pero disponemos de poco tiempo para ello, podemos ganar unos minutos si somos previsores y, por la noche o un día determinado de la semana, hemos tenido la precaución de cocinar de forma anticipada congelando los alimentos. De esta manera sólo debemos (...)
Si hemos adquirido la costumbre de comer siempre en el mismo restaurante será conveniente establecer un horario y seguirlo fielmente. De esta forma con el paso de los días, y a medida que nos convertimos en buenos clientes, seremos mucho mejor atendidos y puede que hasta tengamos reservado el (...)
Comer fuera del trabajo o de la empresa nos ayudará a desconectar mucho mejor de nuestras ocupaciones laborales. Comer en la empresa nos recordará que después de la comida seguiremos trabajando y ello puede crear tensión.
Si por distancias, tiempos o causas de fuerza mayor no podemos abandonar el (...)
Para comer debemos hacer un alto en nuestra vida.
Sabido es que muchas personas recurren a la hamburguesa fácil, a la pizza rápida y motorizada o al ligero tentempié envasado. Sin entrar por ahora en qué comer, debemos incidir en un aspecto por encima de todo: comer es comer y nada más.
Aquí no (...)
La hora de la comida debería ser siempre sagrada. Muchas veces el trabajo u otras ocupaciones no nos dejan comer bien y ello se debe a una falta de previsión. El momento ideal para una comida será iniciarla unos treinta minutos después de terminar de trabajar y concluirla al menos otros treinta (...)